Hola

Empecé este diario cuando me movía entre asociaciones de vendedores de prensa, quiosqueros -yo era uno de ellos- y asociaciones que trataban de unificar ese sector tan atomizado y echado a perder. Cuando la crisis y otras circunstancias municipales me obligaron a cerrar mi negocio, decidí mantener el blog para ir dejando aquí mis impresiones, no solo acerca de aquello, sino del mundo que me rodea.

Siempre hay cosas que decir, siempre hay algo por lo que luchar...

#PrimaveraValenciana

Después de la que está cayendo y la que falta por caer, después de un 15M descafeinado que se ha diluído entre no se sabe qué movidas políticas, parece que la gente empieza a moverse aunque sea reaccionando a los palos de las fuerzas del desorden.

¡Españoles, Franco ha vuelto! grita el fiambre de Arias Navarro levantándose presuroso de la tumba ante la nueva venida del salvador de la patria; pero no es Franco, es un PP nostálgico de unos métodos que algunos creíamos ya olvidados. Política de palo y tentetieso, mis decisiones no las cuestiona ni Dios, piensa Rajoy, y mucho menos en la calle, que me la dejó Fraga en herencia.

Lo raro es que a estas alturas, con cinco millones de parados y una reforma laboral que promete dilatar el esfinter anal de miles y miles de españoles, la gente no haya salido a la calle a quemar el país y a poner a estos aprendices de político en su sitio. Que en muchos casos no es otro que la cárcel. Han tenido que ser unos estudiantes que solo pretendían reclamar que les pusieran la calefacción en el instituto los que han conseguido que el Gobierno y los que no son Gobierno, se retraten; mentiras, engaños, manipulación, leyes que solo protegen al empresario e instauran poco menos que la esclavitud, salarios miserables, condiciones inadmisibles, pérdida de derechos y de protección... ¿Y los sindicatos? Creo que están muy ocupados repartiéndose las subvenciones, que nadie los moleste que esto no va con ellos.

Esto, señores, está para irse; para irse a Laponia a cazar focas y a vivir en un iglú con calefacción, garaje y trastero para guardar la ropa mientras nadamos en la abundancia de chorizos. ¿Y Franco qué opina de todo esto?

Creo que está encantado. Le están amueblando El Pardo para la vuelta